Kuala Lumpur, 28 de julio (Éfeso) .- El Gobierno de Tailandia y Camboya acordó el lunes en Malasia declarar un alto el fuego “directo y sin condiciones” de esta medianoche después de cinco días de conflicto en la frontera donde hay 35 muertos.
El primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, anunció un acuerdo en su capacidad del Presidente de la Asociación del Sudeste de Asia (ASEAN), de los cuales Bangkok y Nom Pen son miembros, al final de la reunión entre el Primer Ministro Tailandia y Camboya, Phumtham Wechayachai y Hun Manet.
“Alto fuego inmediato e incondicional, con un efecto de las 24:00 28 de julio (17: OO GMT). Este es el primer paso vital hacia la descala y la renovación de la paz y la seguridad”, dijo Anwar en su intervención con los líderes de Camboya y Tailandia.
El líder de Malasia también dijo que la reunión dio como resultado conversaciones positivas que concluyeron con la obligación de la paz y la seguridad en las áreas fronterizas, en las que unas 300,000 personas fueron evacuadas en la última semana debido a las hostilidades.
Para mejorar esta calcomanía, Anwar continuará, al menos dos reuniones bilaterales se llevarán a cabo, comenzando a partir de uno el martes entre los líderes militares y el otro programado para el 4 de agosto.
Cuando tomó el piso, Hun Manet agradeció la mediación del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en este tema, así como a la participación de China, quien se unió a estas conversaciones como observador.
La reunión de hoy asistió los embajadores estadounidenses y chinos en Malasia, Edgard D. Kagan y Ouyang Yujing.
El presidente camboyano espera que este acuerdo sirva para avanzar y renovar canales diplomáticos, reducidos después de que ambos países llamaron a sus embajadores con respecto a la escalada de conflictos.
“Deje que nuestra discusión bilateral vuelva a la normalidad”, dijo Hun Manet.
Por su parte, Phumtham Wechayachai, quien actúa como primer ministro temporal, dio una suspensión de Paetongran Shinawatra, agradeció a Anwaru y a las partes por su mediación y enfatizó el acuerdo como una decisión pacífica para proteger la soberanía y la vida de las personas.
Después de unas pocas semanas de tensión en la frontera, el jueves 24 de julio, estalló un conflicto entre los ejércitos de las dos partes, que fueron acusados de lanzar ataques, utilizando los combatientes F-16 y los cohetes BM-21, entre otros artillería.
La competencia deja 35 muertos, 22 en el lado tailandés (14 civiles y 8 soldados) y 13 lado camboyano (8 civiles y 5 ejércitos), según el último saldo oficial.
Además, docenas de personas resultaron heridas, y alrededor de 291,000 refugios desplazados en los centros de evacuación y campos temporales, más de 156,000 en Tailandia y alrededor de 135,000 en Camboya. Efusión