Este viernes, la ONU acusó al gobierno de Estados Unidos de “violar el derecho internacional” con sus ataques aéreos a barcos en el Caribe y el Pacífico, que Washington ha vinculado con el narcotráfico.
“Estos ataques, así como su coste humano cada vez mayor, son inaceptables. “Estados Unidos debe ponerles fin”, pidió el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, recordando que, según las informaciones disponibles, más de sesenta personas murieron en estos ataques perpetrados por las fuerzas armadas estadounidenses.
Según el comisario, las personas que se encontraban a bordo de los barcos atacados fueron víctimas de “ejecuciones extrajudiciales” y tales acciones deben cesar “independientemente de los presuntos delitos de los que se les acusa”.
La ONU rechaza el escenario de conflicto estadounidense.
La portavoz de Türk dijo que había transmitido la posición de su agencia a las autoridades estadounidenses.
Estados Unidos ha tratado de justificar estos bombardeos afirmando que forman parte de operaciones necesarias contra las drogas y el terrorismo, y que desde su punto de vista lo que rige sus acciones es el derecho internacional humanitario, aplicable sólo en el contexto de un conflicto armado.
Sin embargo, la ONU no comparte este argumento y no considera que se trate de un conflicto armado ni que podamos hablar de hostilidades declaradas.
Por ello, sostiene que lo que debe guiarnos son los estándares internacionales de derechos humanos.
En este sentido, las acciones militares estadounidenses constituyen una violación del derecho a la vida y constituyen ejecuciones extrajudiciales, explicó la portavoz Ravina Shamdasani.
Estados Unidos está “obligado” a respetar el derecho internacional
“Basándonos en la limitada información proporcionada públicamente por las autoridades estadounidenses, ninguna de las personas a bordo de los buques atacados representaba una amenaza inmediata para la vida de otras personas ni justificaba el uso de fuerza letal contra ellas según el derecho internacional”, explicó.
La ONU exigió que estos asesinatos sean investigados de manera rápida, independiente y transparente, y aclaró que esto debe ser realizado por las autoridades judiciales estadounidenses.
Señaló que realizar estas investigaciones no es una opción, sino una “obligación” de las autoridades de Washington.
Türk reconoció la gravedad del problema del narcotráfico, pero insistió en que Estados Unidos tiene la obligación de respetar el derecho internacional, incluido el contenido en los tratados antinarcóticos de los que el país es parte.
La organización de derechos humanos también aclaró que lo apropiado en la lucha contra el narcotráfico es el uso de métodos policiales, como la interceptación legal de embarcaciones y la detención de sospechosos.
