La Secretaría de Desarrollo Social, a través de su programa de Discapacidad, llevó a cabo una nueva jornada de sensibilización en la peatonal, uno de los puntos más concurridos por turistas y comerciantes. El propósito fue recordar que la inclusión no es solo una política institucional, sino una tarea diaria que debe asumirse desde la ciudadanía.
Sensibilización en espacio público
Durante la actividad se compartió información sobre los derechos de las personas con discapacidad, la importancia de la atención prioritaria y las formas adecuadas de relacionarse con esta población, evitando actitudes discriminatorias o asistencialistas. El mensaje fue claro: la discapacidad no limita la dignidad ni la participación social.
Turismo e inclusión
Al tratarse de un espacio turístico, también se buscó que visitantes y comerciantes entendieran que San Andrés es un territorio que trabaja por ser accesible. Desde el respeto, el buen trato y la eliminación de barreras físicas y actitudinales, la isla puede convertirse en un destino más amable para todos.
Una isla que cuida y reconoce
Con estas jornadas, el programa #SanAndrésSinBarreras reafirma que la inclusión comienza en lo cotidiano: cediendo el paso, atendiendo primero, preguntando cómo apoyar y reconociendo que la prioridad para las personas con discapacidad no es un favor, sino un derecho.
Construir una isla sin barreras es una tarea colectiva.
