Operativo integral para recibir más visitantes
Con la llegada de la semana de receso escolar y el aumento previsto de turistas, autoridades del Archipiélago activaron un plan especial para reducir riesgos en playas y puntos de alta afluencia. La estrategia contempla mayor presencia de fuerza pública para orientar a visitantes y responder con rapidez ante cualquier eventualidad, especialmente en frentes marítimos. Paralelamente, el equipo de salvamento acuático fue alistado como primera línea de atención, tras ejercicios de fortalecimiento y simulacros recientes que mejoran la capacidad de respuesta ante emergencias en el mar.
Policía turística y control de horarios en playa
El plan suma acciones coordinadas con la Policía Nacional para reforzar el componente preventivo en zonas concurridas, en concordancia con anuncios recientes sobre incremento del pie de fuerza dedicado al turismo. Las autoridades también recordaron la vigencia de la norma que prohíbe permanecer en playas después de las 8:00 p.m. (Decreto 097 de 2024), medida orientada a proteger la vida y reducir incidentes fuera del horario de salvamento. El llamado al público incluye recomendaciones básicas: evitar el ingreso al mar bajo efectos del alcohol y no cruzar las líneas de boyado, claves para mantener la seguridad en el agua.
Ornato, servicios y acompañamiento en atractivos
Además del componente de control, el plan incorpora jornadas de ornato y embellecimiento para asegurar condiciones óptimas en playas y espacios turísticos. En la peatonal de Sprat Bight avanzan trabajos de readecuación y fortalecimiento de baños públicos, con el objetivo de ampliar la comodidad y el acceso para todas las personas. En atractivos como Laguna Big Pond, Cueva de Morgan y el Hoyo Soplador se incrementará la presencia de inspectores de turismo para brindar acompañamiento, orientar flujos de visitantes y reforzar mensajes de autocuidado.
Corresponsabilidad y cultura de prevención
La coordinación interinstitucional —Gobernación, autoridad turística, salvamento y Policía— se apoya en un principio de corresponsabilidad: la seguridad no depende solo del Estado, también de las decisiones de cada usuario. Seguir las indicaciones de guardavidas, respetar señalizaciones y horarios, hidratarse, usar protección solar y planear los recorridos ayuda a que residentes y visitantes disfruten de manera segura. Con estas acciones, San Andrés busca que la semana de receso combine orden, buena atención y playas en condiciones, sin perder de vista el objetivo central: proteger la vida y garantizar experiencias turísticas seguras.