midirector ejecutivo Fedesarrollodijo luis fernando mejía En FM su valoración del ajuste del salario mínimo para 2026 y explicó los factores económicos que, a su juicio, deben guiar las negociaciones. Señaló que un aumento correspondiente sería “entre 6 y 6,5%”, basado en la inflación y la productividad.
¿A cuánto debería aumentar el salario mínimo según Fedesarroll?
Mejía indicó que el primer elemento para definir la adaptación inflaciónpor la obligación de preservar el poder adquisitivo de los trabajadores. Recordó que la cifra anual a partir de octubre fue 5,51% y afirmó que las expectativas del mercado apuntan a un cierre “entre 5,12% y 5,3%“, que, según sus palabras, “esya proporciona un piso para el aumento“, considerando la disposición constitucional que exige la protección de esos ingresos.
Otro factor que mencionó fue productividadcon base en cifras publicadas por el DANE. Explicó que la productividad total de los factores ha alcanzado 0,9%mientras que la productividad por empleado registró una variación de -0,32%porque el crecimiento del empleo “alrededor del 3,6%“, superó el avance de la actividad económica, reportado en 2,9% hasta el tercer trimestre.
De acuerdo con estas cifras, el director de Fedesarroll afirmó que un ajuste que supere el rango especificado podría producir efectos similares a los registrados este año, entre ellos mayores presiones sobre inflación. Al respecto, afirmó:Llevamos cuatro meses consecutivos de inflación creciente“, lo que atribuyó en parte al aumento de los costos laborales formales.
¿Qué efectos tendría un aumento de dos dígitos en el salario mínimo?
Consultado sobre la posibilidad de que el Gobierno aumente el cierre por decreto dos dígitosMejía señaló que la discusión tiene componentes técnicos y políticos, especialmente en el contexto preelectoral. Indicó que una decisión de esa magnitud podría usarse como plataforma de campaña, pero destacó que produciría consecuencias similares a las que se verán en 2024.
El interlocutor reiteró que un aumento elevado del salario mínimo afectaría el comportamiento de los trabajadores. precios. Para ilustrar esto, citó el caso de un microempresario que tiene que soportar no sólo el aumento salarial, sino también los costos derivados de la reciente reforma laboral. Según Mejía, este empresario, con márgenes de rentabilidad entre el 2% y el 3%, se ve obligado a trasladar mayores costos al consumidor final.
En cuanto a empleoAseveró que este año hay un cambio visible en la estructura del mercado laboral. Indicó que estaba 66% de nuevos empleos observados en octubre correspondieron a ocupaciones informaluna acción que, como dijo, “No sucedió por mucho tiempo.Afirmó que tradicionalmente el país registraba aprox. 85% del empleo formal en la nueva generación de fuerza laboral.
Mejía concluyó que si se determina un aumento en 2026.dos dígitos“, el país podría volver a enfrentar los mismos efectos: presiones inflacionarias y el deterioro de la calidad del empleo. Agregó que esta dinámica está relacionada con los costos del empleo formal y su impacto en los precios y la estructura del mercado laboral.


