Al mediodía del lunes (16:00 GMT), Melissa todavía se encontraba a 230 kilómetros (145 millas) al suroeste de Kingston, Jamaica, y a unas 530 kilómetros (330 millas) al suroeste de Guantánamo, Cuba, según el NHC de Miami.
El huracán se movía lentamente hacia el oeste a sólo 5 km/h, dijo el centro, pero era probable que girara hacia el noreste sobre Jamaica a última hora del lunes y martes.
El lento movimiento de la tormenta sobre aguas inusualmente cálidas del Caribe contribuyó a su creciente tamaño y fuerza, dijeron los meteorólogos del centro, amenazando a Jamaica con días de vientos catastróficos sin precedentes y hasta 3 pies de lluvia.
“Esto causará graves daños a la infraestructura, cortes prolongados de energía y comunicaciones y comunidades aisladas”, dijo el NHC.
Haití y República Dominicana ya enfrentan días de fuertes lluvias
Los vecinos Haití y República Dominicana ya han enfrentado lluvias torrenciales que han causado al menos cuatro muertes, dijeron autoridades de las naciones insulares.
Damian Anderson, un maestro de Hagley Gap, un pueblo en las altas montañas azules de Jamaica, dijo que las carreteras intransitables ya habían aislado a su comunidad.
“No podemos movernos”, dijo Anderson, de 47 años. “Tenemos miedo. Nunca hemos visto un evento de varios días como este”.
Jamaica ha experimentado muchos huracanes importantes en el pasado, incluido el huracán Gilbert de categoría 4 en 1988, pero un impacto directo de un huracán de categoría 5 no tendría precedentes, dijo Evan Thompson del Servicio Meteorológico de Jamaica.
La categoría 5 es la más alta en la escala Saffir-Simpson, con vientos sostenidos superiores a 250 km/h (157 mph).
PREPARATIVOS PARA CUBA
Gran parte de la mitad oriental de Cuba también se preparaba para la llegada de la tormenta a tierra el martes por la noche.
Las autoridades cubanas dijeron que habían evacuado a más de 500.000 personas que vivían en zonas costeras y montañosas vulnerables a fuertes vientos e inundaciones.
Más de 250.000 personas han sido trasladadas a refugios alrededor de Santiago de Cuba, la segunda ciudad más grande de la isla, que se encuentra justo en el punto de mira de la trayectoria proyectada del huracán.
El lunes, las autoridades cancelaron escuelas, autobuses y trenes hasta nuevo aviso en el este de Cuba antes de la llegada de la tormenta.
No se esperaba que el huracán golpeara directamente la capital, La Habana.
