Bancóldex–Cotelco: una alianza que le sirve al turismo (y a San Andrés)

Bancóldex–Cotelco: una alianza que le sirve al turismo (y a San Andrés)
Facebook
Threads
WhatsApp
X

Un acuerdo con efecto práctico

Bancóldex y Cotelco firmaron un memorando de entendimiento para empujar la competitividad de las micro, pequeñas y medianas empresas hoteleras y turísticas. El foco no se queda en el discurso: combinarán productos financieros y no financieros, formación, asesorías y acompañamiento para mejorar gestión, innovación y acceso a crédito. Para un sector que vive de temporadas y caja ajustada, contar con banca de desarrollo y gremio en la misma mesa es una buena noticia. 

Qué cambia para el empresario

La alianza promete rutas más directas a crédito, leasing y programas de fortalecimiento de Bancóldex, además de herramientas digitales adaptadas a necesidades reales del hotelero: lidiar con estacionalidad, renovar infraestructura y adoptar tecnología sin asfixiar la operación. El anuncio vino con respaldo explícito de las dos cabezas: Cotelco lo plantea como un paso clave para modernizar y hacer sostenible al sector; Bancóldex subraya su apuesta por llevar soluciones a las regiones donde el turismo es motor económico. 

Conocimiento que se comparte

No se trata solo de crédito. El convenio abre espacios para transferencia de conocimiento, con aprendizajes en sostenibilidad, innovación, transformación digital y formalización. La promesa es construir un plan de trabajo conjunto, con comunicación, capacitación y acompañamiento técnico a escala nacional. En destinos insulares como San Andrés, donde cada punto de ocupación depende de calidad, reputación y eficiencia, esa caja de herramientas puede marcar la diferencia. 

Competitividad con identidad

El objetivo final es inclusión financiera y transformación productiva: instrumentos de financiación ajustados al turismo y una hoja de ruta de acompañamiento estratégico que le suba el piso de competitividad a la hotelería del país. Para el Archipiélago, la lectura es directa: menos trabas para modernizar, más capacidades para operar con estándares, y un puente estable entre el día a día del empresario y la banca de desarrollo. En temporada alta o baja, esa coherencia es la que sostiene empleo y experiencia de destino. 

Noticias relacionadas