Aulas que sueñan con drones y robots
En un movimiento que suena más a quijada viajada que a brega sin brizna, la gobernación del Archipiélago armó y entregó nuevas aulas STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas) en colegios como el Brooks Hill e Industrial. La cosa va en serio: estos espacios integran impresión 3D, robótica básica, programación ¡e incluso drones hablados en creole raizal!
Innovación isleña con sabor a mar
Los chiquillos ya no solo sueñan en mapas: ahora diseñan robots que resuelven operaciones o hacen vídeos en creole. Todo con mirada creativa y propósito, yunques de innovación en un espacio donde la ciencia se cuela por la ventana del salón. Al estilo isleño bien raizal: manos a la obra, sin cuento chino.
Dos colegios: símbolo de reconstrucción y futuro
La entrega de estas aulas STEAM en el Instituto Técnico Industrial—renovado tras 10 años cerrado—es parte de una inversión del FFIE por más de 31.900 millones de pesos, que ha puesto en pie doce obras escolares en el territorio insular. Este colegio ahora cuenta con 16 aulas, laboratorio, biblioteca, salón multimedia, comedor, auditorio y más.
De Robinsones a ingenieros de isla
No es cuento: los estudiantes ya están explorando tecnología real, mecanismos y programación en lengua nativa. También desarrollan proyectos como granjas sostenibles, codificación multilenguaje y drones para registrar sus memorias escolares. Y lo mejor: profesores capacitados para guiar este cambio educativo en terreno.
Una apuesta que quiere durar
La educación del archipiélago ya no se mide en pizarrón y tiza mojada. Con estas aulas STEAM se avanza hacia una formación integral, donde la identidad cultural y el pensamiento crítico se entrelazan con la innovación tecnológica. Ahí, entre circuitos y pinceles, florece una isla con futuro de verdad.



